El Servicio de Administración Tributaria (SAT) tiene ya identificadas al presente año más de 8 mil 500 empresas fantasma integradas por contribuyentes que han utilizado o siguen utilizando facturas apócrifas, recordemos que una factura de una operación simulada es aquella que se emite sin que la empresa cuente con los activos y personal necesario para la ejecución de la actividad descrito en el documento fiscal.
Esto nos lleva a preguntarnos ¿Qué es una empresa fantasma? ¿Qué consecuencias tiene pertenecer a ellas o estar ligados a sus operaciones?
Una empresa fantasma es una sociedad la cual utiliza de manera ilícita facturas falsas para crear operaciones simuladas las cuales tiene como objetivo integrar al mercado dinero de operaciones delictivas o fraudulentas, como son recursos provenientes de la delincuencia organizada, así mismo se utilizan para disminuir la carga tributaria de alguna empresa bien constituida, en otras palabras, Lavado de Dinero.
Las empresas fantasmas tienen una vida corta en máximo de dos años, desaparecen para reaparecer los mismos socios con otros prestanombres cambiando la razón social, que por lo general este nombre abarca un amplio numero de actividades en pocas palabras por ejemplo: “Servicios Profesionales en Consultoría de Negocio S.A de C.V.”, ambiguo en su estructura son espejos de humo que lastran y lastiman no solo a las finanzas del país si no también a la seguridad de los ciudadanos, ya que en la mayoría de las ocasiones los empleados que contratan se les niegan los derechos laborales más básicos.
Estas empresas que muchas veces en sus corporativos cuentan con el extenso mobiliario de una silla y una mesa le han costado al país solo en 2019 un monto aproximado de 351,512 millones de pesos un equivalente al 1.4 % del PIB, es por ello que este tipo de empresas y las actividades que se relacionan con ellas sean tipificado como Delincuencia Organizada y los que los integran pueden purgar penas de prisión bastante largas.
Como empresarios antes de tan solo pensar en la adquisición de facturas faltas a este tipo de asociaciones solo por “ahorrar”, puede costar condenas de 2 meses hasta 9 años de prisión, solo por la compra de la factura, si el empresario decide asociarse con empresas fraudulentas las penas de hasta 16 años de prisión ¿De verdad hay una cantidad tan grande como para arriesgarse a perder 16 años de vida en un reclusorio?
Como ciudadanos también esta en nuestras manos empezar a poner un alto no apoyando a este tipo de empresas de delincuentes, estar informados y capacitados es nuestra mejor arma, si deseas saber como puedes tener buenos hábitos fiscales da clic en el siguiente enlace.